Con crucifixión de Jesús concluye Semana Santa en San Pablo del Monte

San Pablo del Monte, Tlax., A. Corona.- Más de tres kilómetros cargando la cruz de casi 150 kilogramos, Jesús de Nazaret, que nuevamente fue representado por Leopoldo Porfirio Otero Pérez, recorrió las calles de los barrios de Jesús y Santiago hasta llegar a las inmediaciones de la exhacienda de la Concepción, lugar en donde fue crucificado.

Con un calor que no rebasaba los 30 grados centígrados a las 13:33 horas de este domingo, pero que se sentía aún mayor, centenares de personas acompañaron a Jesús durante su trayecto que parecía no tener fin pues los diferentes personajes, flagelados por sus verdugos, sentían el tormento de sus adversidades.

Envuelto en sangre y laceraciones por los soldados romanos, Jesús tomó fuerzas después de haber caído en la calle Domingo Arenas sin que pudiera ser ayudado ya que en los intentos de levantar la cruz recibía golpes en la espalda, latigazos y gritos para que continuara su camino.

Eran las 14:16 horas cuando el nazareno cayó en el barrio de Jesús y al levantarse, se le cristalizaron los ojos al ver que la imagen de Cristo Resucitado estaba a un costado de él, pues los mayordomos de ese barrio caminaban en procesión y coincidieron en el trayecto.

Ante ello, hubo una pausa y Jesús, a punto del llanto, inclinó su cabeza en señal de devoción y pidió fuerzas para resistir su calvario y cumplir con la voluntad de Dios de ser crucificado.

Mientras vecinos observaban el viacrucis desde las puertas de su casa y en algunas azoteas, otros pedían que no le pegaran y que mejor lo ayudaran a levantar la cruz que cada vez se hacía más pesada, pero sus voces no eran escuchados hasta que Centurión dio la orden de ser apoyado por Simón de Cirene, mejor conocido como Cirineo, a cargar la cruz.

En las diferentes caídas y con los ánimos ya diezmados, personas de diferentes edades fueron benevolentes para tomar la cruz y continuar caminando, no sin antes ser azotados en la espalda en tres ocasiones.

Al poco tiempo, después de pasar el puente que está cerca de la exhacienda de la Concepción, fue encontrado ahorcado en un árbol Judas Iscariote, después de su arrepentimiento por haber traicionado a su Maestro con un beso en la mejilla.

Metros antes de llegar a su destino, a las 15:20 de la tarde Jesús pareció desfallecer, sin embargo, la fortaleza y el corazón de seguir adelante, impulsó a tomar de nueva cuenta la cruz a sabiendas de que en ella le iban a clavar las manos y los pies.

Momentos después, acompañado de los malhechores Dimas y Gestas, Jesús fue clavado en la cruz y elevado a una altura de casi ocho metros y desde ahí pronunció las famosas siete palabras antes de morir:

«Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen»; «Yo te aseguro que hoy estarás conmigo en el Paraíso»; «Mujer, ahí tienes a tu hijo”; «¡Dios mío, Dios mío!, ¿por qué me has abandonado?»; «Tengo sed»; «Todo está cumplido»; y «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu».

Así, a las 16:03 de la tarde, concluyó el viacrucis de Jesús de Nazaret en compañía de cientos de feligreses en donde actores del Cuadro Artístico San Pablo Apostol, de San Isidro Buensucero, San José los Cerritos, La Magdalena Tlaltelulco, entre otros, fueron partícipes en la representación de la “Vida Pública de Jesús de Nazaret” y “Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo”.

Con el viacrucis de este día y con diferentes actividades en diferentes barrios de San Pablo del Monte, se da por finalizada la Semana Santa, en espera de otro capítulo más en el año 2019.

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