Por Juan Luis Cruz Pérez
Decenas de militantes de Morena no pudieron dormir y no lo harán por mucho tiempo; no pudieron conciliar el sueño y la tranquilidad, porque los nervios les carcomían la mente al pensar en lo que pudo ser, y no llegó: Una candidatura.
Muchos, casi en cientos, se quedaron esperando la llamada; pero el teléfono guinda nunca les sonó y ni les sonará.
La llamada no llegó ni si quiera para decirles: “Gracias por su participación” y mucho menos para explicarles los resultados de una, presuntamente, inexistente encuesta, ni de la vitrina metodológica de ésta, de sus diversos parámetros y tampoco respecto de las preferencias electorales que arrojaron dichos estudios demoscópicos.
La razón del insomnio Moreno es que no les llegó ni la llamada y mucho menos la anhelada candidatura.
Ayer, varios de los que si aparecerán en la lista de candidatos a diputados locales por Morena fueron llamados, convocados y llevados hasta el salón El Conde, ubicado en el barrio de Miraflores, en Ocotlán, en la ciudad capital, para notificarles su nominación y empezaran a entregar cada uno de los documentos oficiales, requeridos por la legislación electoral, así como para recabar la firma de aceptación de candidatura.
Sigilosamente y en horarios distintos, fueron convocados los virtuales candidatos para cumplir con la entrega de requisitos; les pidieron secrecía y algunos, hasta les advirtieron que de “abrir la boca” sobre su nominación, ésta se les retiraría.
Ahí se vio a Jovany Ixtlapale Anselmo, quien, con un día de retraso, al parecer, recibió su regalo de cumpleaños.
La candidatura a diputados local para el ex presidente municipal del PRD y ex militante de Movimiento Ciudadano, está hecha; solo falta que no se la quiten de último momento. Ayer fue uno de los convocados al citado salón para entregar su documentación.
A Morena los plazos lo alcanzaron y este jueves vence el término para el registro de sus abanderados al Congreso del estado ante el Instituto Electoral de Tlaxcala y, siguen sin transparentar su proceso interno.
Y el partido del no robar, no mentir y no traicionar, caerá en la mentira con los suyos, los traicionará al no aclarar el tema de las encuetas y les robará el sueño y la aspiración electoral.
Pese a ello, la idea de Morena es que este miércoles pudieran registrar a sus candidatos a diputados locales; tanto a los 15 abanderados de mayoría relativa como a los 10 que integran la lista de representación proporcional. De no reunir la documentación de todos, el registro se postergará al jueves.
Quien no fallará a la cita es su candidata al gobierno del estado por la coalición Juntos Haremos Historia en Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros, quien este día, con el respaldo del líder nacional de Morena, Mario Delgado, registrará su postulación.
Varios precandidatos de Morena ya se están alistando para manifestar su inconformidad a su dirigente, a quien responsabilizan por su incapacidad para llevar a buen puerto estas designaciones, en donde, a decir de los afectados, ha sido el gandallismo, el compadrazgo y los intereses de la cúpula lo que ha imperado.
Y la historia de la definición de los candidatos a diputados locales se repetirá en menos de un mes con la nominación de candidatos a alcaldes, síndicos, regidores y presidentes de comunidad.
A los de Morena, a muchos, se les fue el sueño y el insomnio electoral les durará por los menos otros tres años.
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